Somos una pequeña bodega familiar, fundada en 1999 y dirigida por el matrimonio de enólogos María Sáenz-Olazábal y José Manuel Echeverría. Después de trabajar y dirigir otras bodegas en varias Denominaciones de Origen, decidimos embarcarnos en nuestro propio proyecto, aprovechando la larga trayectoria de viticultores en nuestras propias familias. Con nuestros viñedos practicamos una viticultura muy tradicional, respetando al máximo el medio ambiente y el trabajo que desde hace muchas generaciones hacían nuestros antecesores. Hacemos una viticultura sostenible, sin el empleo de abonos de síntesis y sin el uso de insecticidas. Fundamentalmente cultivamos las variedades Garnacha, Syrah, Merlot y Tempranillo. También las blancas Garnacha blanca, Chardonnay y Sauvignon blanc. Nuestros vinos están elaborados de manera muy artesanal, no utilizando levaduras comerciales. Tampoco son clarificados , filtrados ni estabilizados por frío. Nos gusta que el tiempo y el reposo en nuestras selectas barricas hagan su trabajo. La filosofía es ofrecer unos grandes vinos, que reflejen el terruño y carácter de nuestra tierra, vinos originales y con personalidad, siempre basados en la elegancia de sus taninos y su gran volumen en boca.